Desmintiendo la falacia de las subvenciones a los toros: el caso de Madrid

Interesante noticia de la revista Aplausos:

El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, en su número 309 con fecha 30 de diciembre de 2013, aporta en uno de sus capítulos los ingresos y gastos anuales que para la administración pública supone la celebración de espectáculos taurinos en la capital de España.

Tal y como se desprende de los datos revelados en los presupuestos oficiales, los ingresos procedentes del canon de Las Ventas ascienden a un total de 2.325.000 euros. Si a esos ingresos les restamos los gastos derivados de la manutención del edificio, la organización de actos culturales, las aportaciones a las escuelas taurinas y a los ayuntamientos de la comunidad para que puedan dar toros…, que alcanzan un total de 1.409.422 euros, quedan 915.578 euros de beneficio para la administración pública madrileña.

Con esos datos encima de la mesa puede refutarse la idea -por desgracia tan extendida- de que el toreo está subvencionado. Ahí está el caso de Madrid -extensible a otras muchas otras comunidades- para desmentirlo. De hecho, en el presupuesto oficial publicado por el BOCM hay una disposición adicional que afirma que el dinero destinado a los asuntos taurinos procede del canon de Las Ventas: «Los derechos del canon aportados por la empresa adjudicataria de la explotación de la Plaza de Toros de Las Ventas, se destinarán a la mejora del edificio y de las instalaciones de dicha plaza, así como al fomento y promoción de la Fiesta de los Toros en todas sus dimensiones», reza la disposición.

Así las cosas, todo el gasto de la Comunidad de Madrid en actividades relacionadas con la tauromaquia (1,4 millones al año) proviene de los ingresos derivados del canon de Las Ventas, que asciende a 2,325 millones de euros (para más detalle, hagan click aquí).

A esto debemos añadirle, eso sí, unos ingresos por IVA que dejan 1,5 millones de euros en el fisco madrileño. A esto unimos algo aún más importante: la feria de San Isidro moviliza una cifra de negocio de 50 millones de euros. De este total, 13,8 millones corresponden a la venta de entradas, 11,4 millones a los efectos indirectos derivados de los gastos en hostelería, alojamiento y transporte, y finalmente 24,5 millones a las transacciones intersectoriales que se inducen en la economía madrileña para poder satisfacer la demanda creada.